Las panaderías que comercializan pan con un 25 por ciento menos de sal se encuentran en: Resistencia -Brown e Italia, Santiago del Estero 250 y Avenida Castelli 450-, Quitilipi, Machagai y Presidencia la Plaza. “Es importante que más panaderías se sumen a la campaña, para que todos los ciudadanos tengan la opción de cuidar su salud”, señaló el director de Enfermedades Crónicas No Transmisibles, Carlos Olivello, y aseguró que el tema está instalado en la agenda sanitaria de la Provincia.

Según datos de la Dirección Nacional de Promoción de Salud y Control de Enfermedades No Trasmisibles, en Argentina actualmente se consumen 11 gramos de sal por habitante por día, más del doble de lo recomendado por la Organización Mundial de la Salud y más del 70 por ciento de esta sal proviene de los alimentos procesados. “Estamos desarrollando acciones claras que permitan mejorar la calidad de vida de la población, porque sabemos que con medidas sustentables también contribuiremos con las generaciones futuras”, aseveró.

En esta línea, aseguró que la Provincia trabaja con el Centro de Industriales Panaderos del Chaco para sumar panaderías a la campaña. Vale decir que con la disminución de un gramo de sal en la dieta diaria se evitan unos 20.000 eventos cardiovasculares por año y al menos 2.000 muertes.

Diego Ballesta –titular del Centro de Industriales Panaderos del Chaco- destacó la importancia de que el sector panadero tome consciencia del “gran aporte” que, a través de la disminución de la sal, realiza a la calidad de vida de los chaqueños. En este sentido, reivindicó todas las capacitaciones que se lleven a cabo para los trabajadores, las cuales tendrán repercusión directa en la sociedad.

Es sabido que el exceso de sal en la dieta es uno de los determinantes más importantes de la presión arterial elevada, que representa la principal causa de enfermedad y muerte en América Latina, y particularmente en nuestro país. A pesar de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda una ingesta de no más de 5 gramos por día de sal, algunas fuentes indican que los argentinos consumen un promedio de entre 11 y 12 gramos diarios.