Gabriel Batistuta ,a los 47 años, cuestionó cómo se organiza el sistema de fútbol argentino y lo calificó como: "En el plano organizativo, el fútbol argentino me parece un desastre total. Acá nadie sabe ni cuándo juega, es una vergüenza".

Consultado sobre cómo ve al fútbol argentino, el ex delantero no se guardó nada y ejemplificó: "Hace un mes llamé a jugadores y a técnicos para invitarlos al torneo benéfico de golf y me contestaron 'quisiera ir, pero no puedo asegurártelo porque no se cuándo juego'. Eso te hace calentar mucho: no estamos hablando del servicio meteorológico, que con un mes de anticipación puede pasar cualquier cosa; esto depende de una decisión. Vas a Italia o a España y antes de que empiece el torneo ya sabés a qué hora se juega el último partido de la liga. No es una ciencia. No es que allá son un genios, ¿eh? Empezando por ahí, y esas son las cosas más estúpidas. Así está el fútbol", dija al diario La Nación.

 

Respecto a la propuesta futbolística, Batistuta señaló que sólo dos o tres equipos "tienen una idea". 

En este sentido contó: "El domingo de los clásicos me dormí en mi casa; para colmo llovía, no sabía qué hacer. Fue un desastre. Ni dos pases seguidos hacían, apenas un poquito en Racing-Independiente. Si lo querés justificar, podés decir que en los clásicos hay un ambiente particular por los miedos, las presiones, pero generalmente es así. Para mí hay mucho vértigo, creen que la intensidad tiene que ver con la velocidad y las fricciones, y no es así. Intensidad es sostener un ritmo, tener dinámica".

"Están confundidos. Equivocaron poner huevos con pegar trompadas, huevos es pedirla: dámela ahora que yo soy el que hace los goles. Acá creen que huevos es, ante la primer pelota, pum, una trompada para que la tribuna te aplauda. Eso es una p... gigante. Y todo el ambiente está contagiado de ese mensaje, que los medios también bajan", agregó.