La escalada de violencia entre Israel y Palestina generó la preocupación en la Asociación Argentina de Tenis ya que en poco más de un mes el equipo de Copa Davis deberá enfrentar a Israel por la permanencia en el grupo mundial entre el 12 y 14 de septiembre y la sede designada para el duelo es la ciudad de Tel Aviv.

Ante esta situación la AAT expresó su preocupación por la seguridad en la ciudad designada y le envió un comunicado a la Federación Internacional de Tenis que anunció una resolución en los próximos días.

Arturo Grimaldi, presidente de la AAT, explicó la situación en los últimos días: "Nosotros creemos que la situación no está para tener el mejor ánimo para jugar en Tel Aviv. Hemos manifestado nuestra preocupación ante la ITF. Ha sido el segundo comunicado y ellos se han comprometido a tomar una decisión en los próximos días, antes del viernes. Si no se toma la decisión en los próximos días, es imposible cambiar de sede".

Ante esta situación el máximo dirigente del tenis explicó las dos posibilidades que surgen como solución, la primera es que Israel renuncie a la localía, por lo que la serie se trasladaría a Argentina y el conjunto israelí tendrá dos series consecutivas como local en el futuro, y la segunda que elija mudar la serie a un terreno neutral manteniendo la localía.

Grimaldi ve "muy lejana" la posibilidad de jugar en Buenos Aires: "La FIT es muy reacia a tomar una decisión de ese tipo. Si la ITF dice que hay que ir a jugar, tendremos que ir a jugar", agregó.

"En la ITF nos dicen permanentemente que están muy preocupados y tienen equipos de seguridad que están trabajando e informándoles. Vamos a pedirle a la FIT que tome una decisión antes de final de mes. Todos estamos muy preocupados porque la situación es desagradable", explicó Hector Romani, vicepresidente de la AAT.