Según la última publicación del INDEC, la Canasta Básica Total, que incluye alimentos, educación, vestimenta o transporte se incrementó en los últimos doce meses un 55,8%. En ese mismo lapso la inflación había sido de 49,3%, por lo que la brecha fue de unos seis puntos porcentuales.

En cuanto a la línea de indigencia, también aumentó 3,7%, según la publicación. Por lo que una pareja con dos hijos requirió ingresos por 10.557 pesos para no ser considerada indigente. Para un solo individuo, la canasta básica alimentaria fue de 3.423 pesos.

En el último año, los porcentajes de indigencia y de pobreza aumentaron a ritmos similares con la tendencia general de los precios. El mes de mayor incremento de los valores de las canastas básicas fue septiembre, justo en el mes en que el IPC llegó a su pico de 2018, con 6,5%. 

En diciembre, los dos indicadores aumentaron levemente (0,7% la línea de indigencia y 1,1% la de pobreza), pero en enero, el aumento de la inflación impactó de lleno en el costo de vida.

Tanto la canasta alimentaria, como la canasta total, definen la variación que tendrán los indicadores de pobreza e indigencia en el país. Cuanto más alta sea la brecha entre el aumento de los salarios y el encarecimiento de las canastas, mayor impacto tendrá en la cantidad de pobres e indigentes. En marzo, el INDEC publicará los números finales de 2018, en el que se espera un incremento debido a la caída del poder de compra del salario.

Cabe recordar que, según un estudio de la Consultora G. Córdoba y Asociados, al actual Presidente y principal opositor de Cristina Kirchner, no le iría tan bien en la competencia electoral de este año. Y es que, los resultados del sondeo lanzaron que más de la mitad del país (un 64,7%) desaprueban la gestión del actual jefe de Estado.

De hecho, los encuestados manifestaron una visión pesimista acerca de la marcha de la economía argentina como consecuencia de las políticas administrativas efectuadas por Cambiemos. Según datos del informe, más del 66% de la población cree que la actividad económica local “va estar peor que ahora”.

El Intransigente.