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Un ex marine entró a los tiros a un bar, mató a 12 personas y se suicidó

Un hombre entró a los tiros en un bar de California lleno de estudiantes universitarios este miércoles por la noche y mató a 12 personas, incluyendo un policía.

 

El asesino también apareció muerto: era un ex marine, blanco, de 28 años y con antecedentes. 

Se trata de una de las peores masacres de los últimos 20 años en los Estados Unidos. "Un terrible tiroteo", sostuvo el presidente Donald Trump este jueves por la mañana.

El episodio ocurrió en Thousand Oaks, una localidad de alrededor de 130.000 habitantes ubicada en el condado de Ventura, a unos 60 kilómetros de Los Ángeles. El tirador, identificado como Ian David Long, veterano del cuerpo de Marines, llegó a la zona manejando el auto de su madre.

Ingresó antes de la medianoche en el local, llamado "Borderline Bar and Grill", donde se desarrollaba la fiesta estudiantil "Noche de Country".

Holden Harrah, de 20 años, lo vio: estaba vestido de negro, con lentes, barba y sombrero. Long lanzó granadas de humo, luego atacó a un empleado de seguridad y se puso a disparar indiscriminadamente, sin decir una palabra, con una pistola Glock calibre 45 comprada legalmente.

El sheriff Geoff Dean detalló que hubo al menos 18 heridos (no de bala) y confirmó que uno de los fallecidos era su número 2, el sargento Ron Helus; acreditaba más de 29 años de servicio, recibió varios balazos y murió en el hospital. Estaba por jubilarse.

Antes de concurrir a la emergencia, llamó a su esposa: "Le dijo: 'Querida, me tengo que ir. Te amo'", dijo Dean.

Es el segundo tiroteo masivo en el país en menos de 2 semanas. Hace 10 días un hombre ingresó a los tiros en una sinagoga de Pittsburgh y asesinó a 11 personas, en el peor atentado antisemita de la historia estadounidense. El alcalde Andy Fox le dijo a la CNN que Thousand Oaks es "una de las ciudades más seguras del país".

Teylor Whittler había ido al "Borderline" para festejar su cumpleaños 21. Estaba bailando con sus amigos cuando escuchó lo que parecía el estallido de un petardo. Al mirar hacia donde venía el sonido, vio a un hombre con una arma en la entrada del bar.

"Hizo todos los disparos que pudo", narró Matt Wennerstron, universitario de 20 años. "Cuando empezó a recargar sacamos a la gente de ahí y nos fuimos sin mirar atrás."

Otro testigo dijo que todo pasó alrededor de las 23:30 hora local y fueron "al menos 30 disparos".

Cerca de las 7 hora argentina (las 2 en California) llegaron al lugar numerosas ambulancias y equipos especiales del FBI.

Los testimonios recogidos coinciden en la descripción de un escenario espantoso, con decenas de tiros resonando dentro del lugar mientras la gente corría a refugiarse.

Algunos incluso rompieron ventanas para tratar de salir. Otros se escondieron en el baño o en un altillo.

Para el presidente norteamericano Donald Trump, se trata de "un tiroteo terrible". Vía Twitter destacó además la "gran valentía" que mostró la policía.

"Dios bendiga a las víctimas y a sus familias", sostuvo.

 

 

 

Diario Veloz