Buscará llegar a un acuerdo, tal como lo hizo Héctor Alberto Zabaleta, el ex directivo de Techint, que figura en los cuadernos de Oscar Centeno. 

A medida que avanza la causa de los denominados "cuadernos K", no solo el kirchnerismo se encuentra en el centro de la polémica, sino también el oficialismo y algunos empresarios. Es que gracias a los escritos que realizó Oscar Centeno, exchofer de Roberto Baratta, que se acogió a la figura de arrepentido junto al empresario Juan Carlos De Goycochea, los directivos de las compañías que participaron del "club de la obra pública" empezaron a desfilar por la Justicia. 

En tanto, desde esta semana comenzarán las indagatorias convocadas por Bonadio a 18 personas, entre las cuales se encuentra la ex presidenta, Cristina Fernández de Kirchner, que cerraría la primera ronda y está citada para el 13 de agosto próximo; el ex juez Norberto Oyarbide, el miembro de la Auditoría General de la Nación (AGN), Javier Fernández y el extitular de la AFI, Oscar Parrilli.

Hasta el momento, algunos de los empresarios detenidos son: Carlos Mundin (BTU SA), Walter Fagyas (Enarsa), Javier Sánchez Caballero (Lecsa), Gerardo Ferreyra (Electroingeniería), Jorge Neira (Electroingeniería), Armando Losón (Albanesi), Claudio Guzmán (Sociedad Latinoamericana de Inversiones), Carlos Wagner (extitular de la Cámara Argentina de la Construcción) y Francisco Valenti, aprehendido durante el sábado. Mientras que De Goycoechea (Isolux), también apresado, pidió declarar como "arrepentido".

Por su parte, los exfuncionarios apresados son: Roberto Baratta, exsecretario de Coordinación del Ministerio de Planificación Federal; Nelson Lazarte; Rafael Llorens, exsecretario legal de Planificación; Hugo Larraburu, exsecretario de Juan Manuel Abal Medina; Hernán Gómez, exasesor de Planificación; y Fabián García Ramón, exfuncionario de ese ministerio. En tanto, quien aún está prófugo es Oscar Thomas, exdirector ejecutivo del Ente Binacional Yacyretá.

Vale recordar que Centeno, el autor de esta "bitácora del delito", recuperó su libertad luego de que Bonadio homologara el acuerdo por el cual es calificado como "imputado colaborador" y se lo incorporara preventivamente al Sistema de Protección de Testigos, a cargo de la Secretaría de Justicia. Asimismo, el exchofer de Roberto Baratta aseguró que teme por su vida, por lo que fue alojado en un domicilio reservado.

En tanto, ante el magistrado, el "remisero de poder" habló sobre uno de los puntos más polémicos de la causa, ya que desde el kirchnerismo reclamaron conocer los cuadernos originales. Sin embargo, Centeno afirmó que “quemó los cuadernos en la parrilla”, al tiempo que explicó que estaba solo en su casa y llegó a esa decisión porque estos cuadernos le estaban trayendo muchos problemas. El Intransigente.